Agricultura y crisis de agua en Nuevo León

Ante la crisis de agua que presenta Nuevo León, muchas organizaciones no gubernamentales y especialistas coinciden en la gran necesidad de establecer medidas que regulen el consumo del sector agrícola, que ocupa poco más del 70% de todo el recurso en el Estado.

El Registro Público de Derechos del Agua de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), informa que en Nuevo León los sectores que utilizan la mayor cantidad de agua son la agrícola con el 71%; mientras que un 25% está destinado para abastecimiento público y sólo el 4% es consumido por la industria.

Nuevo León, la entidad que atraviesa por la peor crisis de agua en las últimas décadas, obtiene este recurso en un 57% de aguas superficiales y un 43% de aguas subterráneas.

"En general, la información que se tiene respecto a este tema, consiste en las concesiones que otorga la autoridad de agua, misma que están documentadas en el Registro Público de Derechos de Agua (REPDA); sin embargo, no se sabe exactamente cuánta agua se aprovecha para los fines que realmente fueron asignados" lo que puede caer en un abuso en el uso del vital líquido por parte de los concesionados, señala el documento expedido por la REPDA. Situación que ya está sucediendo pues, en opinión de las organizaciones no gubernamentales no hay un reparto equitativo del agua, mientras empresas, usuarios agrícolas y ganaderos, lo mismo que consumidores domésticos de exclusivas zonas residenciales no carecen del líquido, cientos de colonias populares llevan semanas sin recibir agua.

Ante todo esto, los especialistas en la materia consideran que es urgente y necesaria la modernización de los sistemas de riego, así como contar con una mejor regulación del recurso hídrico, ergo una regulación inmediata a la ley de concesiones hídrica en Nuevo León.

FoodUnfolded, plataforma creada para reconectar a las personas con el origen de los alimentos y el medio ambiente, considera que para resolver la crisis de escasez de agua por el cambio climático es indispensable cortar la sobre explotación del recurso por la industria, lo que conlleva una regulación radical a las formas de producción actuales.

Así mismo, en el Día Mundial del Agua 2022, celebrado el pasado 22 de marzo, la Organización no Gubernamental, Pro Natura, hizo un llamado a preservar este recurso no renovable, ya que nuestra supervivencia y la del ecosistema dependen de ello.

Entre otra soluciones se propone establecer sistemas de riego de alta tecnología; sistemas de riego por goteo para las regiones más pobres; almacenamiento de agua en las regiones áridas; mejora del tratamiento de aguas residuales y el uso de acuaponía con una combinación de técnicas agrícolas. Sin embargo, sabemos que la solución más eficiente es la redistribución equitativa, sin miras a ver el agua como una mercancía, si no como un derecho humano, lo que nos lleva a anteponer las necesidades de la población sobre las necesidades de cualquier área de la industria.

"Un Estado tan importante como Nuevo León debe ir un paso adelante en la planeación hídrica; sobre todo considerando las variaciones climáticas extremas de la región, y la dinámica económica y social que caracteriza a nuestro Estado", consideró Alfonso Garza Garza, presidente del Fondo Ambiental Metropolitano de Monterrey (FAMM) cuando se presentó el plan hídrico.

No obstante, los problemas que presenta actualmente el Estado de Nuevo León con respecto al agua no son un caso aislado. El pasado 1ro. de julio entró en vigor (pese a la protesta social) en el Estado de Querétaro la Ley que Regula la Prestación de los Servicios de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento del Estado de Querétaro, en el cual se establece que: "los municipios o la Comisión (Estatal de Aguas) otorgarán las concesiones para la distribución del recurso en el Estado". Por lo tanto, dicha ley deja a la población queretana en una estado de vulnerabilidad, que podría reflejar la situación hídrica de Nuevo León en los próximos años.